Saga llevaba varios meses sola, viviendo por unas parcelas y comiendo lo que podía. Tenía tanto miedo que era imposible acercarse a menos de 20 metros. Cuando decidimos que su situación tenía que cambiar, nos enteramos de que había sido atacada por cuatro perros y no sabían nada de ella, la daban por muerta. Por suerte la encontramos y la pudimos coger. Se encontraba en muy mal estado, desnutrida, con unas heridas tremendas y llena de garrapatas. Una de sus patas había perdio el músculo y se veía el hueso, creímos en un principio que tendría que ser amputada