A Summa la vida le dio una segunda oportunidad al entrar en APADAN. Su pasado es muy triste, tenía un dueño pero hubiera sido mejor no tenerlo nunca, porque la pobre vivía sola y abandonada en una finca sin apenas comida que llevarse a la boca. Sabemos que en ese sitio infame pasó años, una vida triste para una perra extremadamente sociable y alegre, si ya para cualquier perro es horrible vivir solo, mucho más para una perra como ella, que ha tenido que vivir en el auténtico infierno. Por Summa han pasado los años pero a ella a eso le da igual, está viviendo su mejor momento, alegre, divertida, extrovertida, todo en su vida está lleno de color. Es una perra espectacular, bonita en todos los sentidos, sólo necesita una familia a la que querer como sólo ella sabe hacer.